Nuevo llamado del papá de Kim Gómez en medio del dolor: «Si tengo que ser la bandera, voy a poner el pecho»
Marcos, el papá de Kim Gómez, habló nuevamente tras el velorio de su hija. En medio del dolor, expresó su deseo de luchar para que lo ocurrido no quede impune y para generar cambios. Desde la puerta del Cementerio de La Plata, aseguró: «Si tengo que ser la bandera de Kim, voy a poner el pecho».
El crimen de la nena de 7 años conmocionó a La Plata. Kim Gómez viajaba con su mamá en un Fiat Palio cuando dos delincuentes intentaron robarles el auto. La mujer logró bajar, pero la nena, aún con el cinturón de seguridad puesto, quedó atrapada. Los ladrones arrancaron y la arrastraron más de diez cuadras hasta que perdieron el control y cayeron en un canal de Altos de San Lorenzo ubicado en 82 y 28.
En rueda de prensa, su padre expresó una vez más la angustia de la familia y pidió que la sociedad reaccione: «¿Qué está pasando? Hagamos algo, todo el que tenga un contacto me ayuda. Ya me conocen, saben cómo me llamo, cómo localizarme. Me voy a poner en campaña para que esto no quede así, yo quiero que cambien las cosas».
Con la voz quebrada, recordó a su hija con amor y emoción: «Los hijos son especiales, Kim era todo, era mi ángel, mi amor. Amaba a su tío, a toda su familia, tenía muchos amigos». También mencionó las cartas que le enviaron los compañeritos de la nena: «Me tomé el atrevimiento de leerlas, la inocencia de todos los chicos recordando cómo jugaban… Esas cosas hoy me hacen estar un poco más en paz», aseguró.
La angustia del papá de Kim Gómez en el Cementerio
En medio del dolor, remarcó que no se quedará quieto y convocó a la sociedad a movilizarse: «Quiero activar, vamos a marchar, vamos a ir a todos los canales. Quiero que me escuchen, dialogar. Uno se tiene que hacer responsable de los hijos, vos tenés que criarlos para bien y si está haciendo las cosas mal tenés que corregirlo».
También se refirió a Héctor, el padre del delincuente de 17 años que entregó a su hijo y al otro implicado, de 14: «Hoy le pedí que se acerque. Si yo hubiese sido Héctor, estaría acá pidiendo disculpas en todo momento. Me llamó pero, ¿cómo hacés para verlo a los ojos en una llamada? No se puede. Las cosas se hablan cara a cara, donde todos nos podamos ver». Y agregó: «Acepto que tenga miedo, pero hay que ser valiente en la vida, lo único que yo quería era que me viera a la cara para ver si era sincero conmigo».
Finalmente, dejó un mensaje claro: «Ahora salgamos a reclamar cosas, luchemos. Quiero salir a trabajar y volver a mi casa con mi familia, y lo mismo quiero para todos. Quiero entender qué es lo que hay que cambiar».