El acusado fue uno de los protagonistas del juicio que se realizó en La Plata. Tras 4 años, fue condenado otra vez por sus crímenes durante la última dictadura.

El Tribunal Oral Federal (TOF) 1 de La Plata dictó sentencia y condenó a prisión perpetua a diez represores por crímenes cometidos en los campos de concentración conocidos como Pozo de Banfield, Pozo de Quilmes, El Infierno de Avellaneda y la Brigada de San Justo. Uno de los imputados en el Juicio a las Brigadas es Jaime Smart, uno de los civiles más influyentes de la última dictadura.

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En un artículo de Página 12, la periodista Luciana Bertoia explicó que el poder de Smart residía en su prédica sobre Poder Judicial, un ascendiente que hay quienes creen que no perdió en estos 40 años de democracia.

«Si bien desde 2012 empezó a cosechar condenas a prisión perpetua por secuestros, homicidios y desapariciones ocurridos en la provincia de Buenos Aires, ninguna de esas sentencias está firme. Smart levantó la cabeza el 25 de mayo para reivindicar mediante una solicitada al tribunal que creó la dictadura de Alejandro Agustín Lanusse para perseguir a los militantes de los años ’70», se destaca en el artículo.

Smart conformó lo que se conoció como el «Grupo La Plata» con Saint Jean y con Alberto Rodríguez Varela, quien ejerció como fiscal de Estado bonaerense y después como ministro de Justicia nacional. Como explica la socióloga Paula Canelo en «La política secreta de la dictadura», aquel grupo fue una usina ideológica que proponía la creación de una nueva clase dirigente y la edificación de un nuevo Estado –»la tercera república»– después de lo que ellos denominaban como la agresión «subversiva».

Todo se hacía en sintonía con Carlos Guillermo Suárez Mason, por entonces comandante del Primer Cuerpo de Ejército y uno de los «duros» de la dictadura. De hecho, antes de su secuestro, Timerman decía en La Opinión que la intención de Saint Jean era desbancar a Jorge Rafael Videla para quedarse con la presidencia.

Desde que se sentó en el banquillo, Smart se preocupó por mostrarse ajeno a la represión y, sobre todo, a Camps: su argumento es que, como civil, no podía ser el superior de un militar.

Sin embargo, una entrevista que dio a Radio Provincia en diciembre de 1976 –y que citaron los Timerman en su denuncia– lo muestra consustanciado con la causa. «En el Ministerio de Gobierno hemos tenido siempre la necesidad de volcar todos los recursos en la lucha contra la subversión. Lo cierto es que la subversión no es la subversión meramente armada», decía entonces Smart. “Hay mucho todavía que averiguar en este país porque la subversión y estos combatientes no nacieron de la nada –evaluaba cuando la dictadura llevaba ocho meses en el poder–. Todo esto fue a causa de personas, llámese políticos, sacerdotes, periodistas, profesores de todas las categorías de la enseñanza que, en su momento, los armaron y ahora han dado un paso atrás para pasar desapercibidos”.

Juicio a las Brigadas

El Tribunal Oral Federal (TOF) N° 1 de La Plata dictó sentencia en el Juicio Brigadas, en cual se investigaron los delitos de lesa humanidad cometidos en los centros clandestinos de detención que funcionaron en el Pozo de Banfield, Pozo de Quilmes, la Brigada de San Justo y El Infierno de Lanús. Los jueces condenaron a prisión perpetua a 10 represores y un acusado recibió una pena de 25 años de prisión. En tanto, uno de los imputados fue absuelto.

Los integrantes de la Unidad Fiscal Federal de La Plata, que interviene en los procesos por crímenes de lesa humanidad, Gonzalo Miranda y Ana Oberlin, desarrollaron las pruebas vinculadas con los 605 casos de víctimas y la responsabilidad de los acusados en los crímenes cometidos en los centros clandestinos mencionados.

Vale recordar que el juicio comenzó en plena pandemia y se extendió durante casi cuatro años. Murieron imputados durante ese tiempo, quizá el más emblemático fue el excomisario Miguel Osvaldo Etchecolatz, director general de Investigaciones de la policía de la Provincia de Buenos Aires.

Condenados por delitos de lesa humanidad

El fallo del TOF N°1:

• Prisión perpetua para Federico Minicucci, exjefe del Regimiento de Infantería Mecanizado N°3 de La Tablada.
• Prisión perpetua para Guillermo Alberto Domínguez Matheu, exjefe de Actividades Psicológicas.
• Prisión perpetua para Carlos Gustavo Fontana, excapitán.
• 25 años de prisión para Alberto Julio Candioti, exjefe de la Sección Comando y Servicio.
• Prisión perpetua para Jorge Héctor Di Pasquale.
• Prisión perpetua para Carlos María Romero Pavón.
• Prisión perpetua para Roberto Armando Balmaceda.
• Prisión perpetua para Jaime Lamont Smart, el exministro de Gobierno bonaerense durante la dictadura.
• Prisión perpetua para Juan Miguel Wolk.
• Prisión perpetua para Jorge Antonio Bergés.
• Absolución para Enrique Augusto Barre.
• Prisión perpetua para Horacio Luis Castillo.